A raíz del suceso vivido por alumnos de segundo grado, padres y docentes en el traumático episodio del pasado 16 de noviembre en Puente Negro, las autoridades de la Escuela convocaron a una reunión a los integrantes del Ferroclub y autoridades Municipales el miércoles 28 de noviembre de 2018 en la parte alta del Colegio a la hora 8. El encuentro duro una hora 35 minutos, con exposiciones de las partes involucradas, donde las madres especialmente, dieron a conocer la angustia vivida y la repercución psicológica que dejo como secuela. Por el Ferroclub se encontraban presentes, Graciela Antonin, Miguel Wagñaux, Hernan Bel, Erik Laureiro, Paul y Rafael Pirolla. Por la Municipalidad de Villa Elisa, estuvieron Anibal Faure, Secretario de Gobierno y Damián Pallardos, director del área de transito. Desde la Municipalidad se aclaro, que la misma no tiene ninguna responsabilidad sobre el tren, y su acción se limita a resguardar los pasos a nivel en cada salida, como ocurrió en el viaje del 16 de noviembre.
Se cuestionaron puntualmente las condiciones de los vagones, su escaso mantenimiento, la velocidad con que se traspaso el puente Negro y la cantidad de pasajeros en ese viaje.
Desde el Ferroclub se asumió que el mantenimiento no es el adecuado, fundamentalmente porque solo una persona se encarga de ello desde el año anterior, después del fallecimiento de Isauro Pirolla. La seguidilla de viajes de noviembre fue un factor decisivo en esta instancia. Sobre la velocidad del traspaso del puente, los padres coincidieron que era superior a la establecida por protocolo, que es paso de hombre.
En cuanto a la capacidad de los coches y los pasajeros, se aclaro, que la capacidad de los 22 asientos, es de dos personas adultas por cada uno, es decir, 44 pasajeros, pero tratándose de escolares, cuya talla es mucho menor, se acordó entre el Ferroclub y la Escuela que podían viajar hasta 60 personas.
La reunión fue muy respetuosa y con incentivos a seguir la actividad del tren, lo que se tradujo en la noticia que hasta el año 2019 el tren no volverá a funcionar a ningún destino. Una vez obtenida la certificación técnica de la CNRT y las condiciones de transitabilidad otorgadas, se retornara a la actividad. En el caso que el tren de carga gestionado, se hiciera realidad, el objetivo fundacional del Ferroclub, de la vuelta del ferrocarril se habrá cumplido, por lo que el trabajo se limitara a los paseos en zorra cuando sea posible y el uso de la vía para el tren estará condicionado a la disponibilidad de vía libre. A partir de ahora, se comenzara a reparar totalmente los coches de pasajeros, para lo cual se adquirió un torno, a fin de realizar las actividades con sus propios integrantes en el taller de la estación Elisa.