Porque durante mis 8 años de mandato al frente de la Municipalidad, la población de mi Ciudad (la que me voto y la inmensa mayoría de quienes no me votaron) se convencieron que al margen de lo que pudimos hacer para mejorar la ciudad o mas allá de cualquier error que pudimos cometer, hemos hecho de la honradez y la decencia una bandera política de nuestro grupo, (valores que se habían perdido en la dirigencia política que nos representó durante algunos años en San José)
Porque tengo un apellido que honrar, porque lo herede limpio y se lo traspasaré a mis hijos de la misma manera.
Porque mi familia y amigos me conocen, pero aquellos que no me conocen podrían creer cualquiera de las barbaridades que ha dicho, insinuado o sugerido el Concejal Jourdanista, Gustavo Woeffray.
Porque represento a un partido que merece ser defendido ante estos embates de personas que pretenden regresar por cualquier vía a manejar las arcas municipales.
Porque como Intendente (a diferencia de otro) NUNCA fui noticia por instigar o mandar a golpear Concejales o dirigentes de la oposición, o por invadir la privacidad de las personas, o ejercer con exceso de poder, o por tener prerrogativas, sino que por el contrario siempre fui uno mas de mi comunidad a quien respete y respeto.



En virtud de lo expuesto es importante remarcar que todas las acciones de los 8 años de gobierno estuvieron en el marco de la Constitución, las Leyes y las Ordenanzas que nos rigen.

Que nunca hicimos de manera impulsiva o abusando de la mayoría en el Concejo, modificaciones a las Ordenanzas vigentes en materia de compras o excepciones a ella, para evadir controles o derogarlos (como SI paso en la administración de Jourdan, a quien representa el Concejal).

Que cada peso público que se manejó, estuvo controlado por el Contador Municipal, CPN Juan Manuel Bravo (quien no fue puesto por nuestra administración, ni pertenece políticamente al vecinalismo), a quien claramente debo agradecerle su dedicación porque eso nos ayudó a ser mejores.

Que seguramente será la actual Intendente, como corresponde, quien conteste punto por punto las requisitorias del Concejal Jourdanista, pero desde ya aclaro que NO tengo NADA que ocultar. Porque un informe del Tribunal de Cuentas, no es ni mas ni menos que observaciones o sugerencias de los auditores, que son contestadas en el mismo momento de la auditoria, a los pocos días o corregidas para el próximo ejercicio, pero que por otro lado, y con el respeto que merecen los auditores, muchas veces se equivocan al plantear dichas observaciones.

Sirva la presente de primera aclaración que será complementada con la contestación técnica al pedido de informe que realizará la Intendente cuando lo considere oportuno y que yo también daré a publicidad.



Pero como dice el viejo dicho… “El Ladrón cree que todos son de su condición”.





Pablo A. Canali